Uno de los lugares más contaminados del mundo se encuentra en el corazón del Delta del Níger, donde décadas de explotación de petróleo han devastado la flora nativa. Al frangear el delta del río Níger, los bosques de mangle locales son esenciales para la biodiversidad y la supervivencia de las comunidades locales. En Nigeria, los científicos, activistas y abogados están uniendo fuerzas para proteger y restaurar este ecosistema. Judith Rueff y Moïse Gomis se sumergieron en la vida cotidiana de estos hombres y mujeres que se niegan a ceder ante la catástrofe. Una producción de Factstory, Arte Geie y Francia 24.