Kirguistán y Tayikistán firman el acuerdo fronterizo histórico después de décadas de disputas

El presidente de Tayikistán, Emomali Rahmon, y el presidente de Kirgugyzstan, Sadyr Japarov, ratificaron el acuerdo el 13 de marzo en Bishkek.
Las multitudes se reunieron en la frontera entre Kirguistán y Tayikistán, esperando cruzarlo por primera vez desde 2021.
Las personas finalmente podrían reunirse con los miembros de su familia después de que el presidente de Tayikistán Emomali Rahmon y el presidente de Kirguistán Sadyr Japóv firmaron un acuerdo fronterizo el 13 de marzo en Bishkek, lo que puso fin a décadas de disputas y conflictos intensificadores.
"El Tratado Fronterizo creará una base sólida para una mayor expansión integral de nuestras relaciones interestatales y abrirá una nueva página en las relaciones tayikas-Kirguise", dijo Rahmon.
"La firma del acuerdo fronterizo entre Kirguistán y Tayikistán se convertirá en un evento histórico histórico", agregó el presidente de Kirguistán.
"Este paso hará una contribución significativa para fortalecer la seguridad, la estabilidad y el desarrollo sostenible no solo de nuestros estados, sino también de toda la región de Asia Central".
La frontera entre los dos países, que habían sido disputados durante años, se cerró en 2021 después de violentos enfrentamientos.
Una historia tumultuosa
Las negociaciones sobre la frontera de 1000 kilómetros duraron 23 años.
Aunque los países lograron aceptar algunas secciones fronterizas en áreas montañosas, se dividieron sobre cómo dividir los recursos de tierras y agua de pastos.
Las disputas locales condujeron a bloqueos de carreteras, lanzamiento de piedra y enfrentamientos que frecuentemente atraían a los guardias fronterizos.
La naturaleza local de los enfrentamientos duró hasta 2021, cuando, por primera vez, estaba involucrado un gran equipo militar.
Una disputa sobre una estación de entrada de agua se convirtió en un conflicto, lo que resultó en 55 muertos y 300 heridos en ambos lados.
Como resultado, ambos países cerraron sus fronteras y detuvieron los viajes aéreos al otro.
Las tensiones se volvieron nuevamente en septiembre de 2022 en lo que se convirtió en la confrontación más severa hasta la fecha.
Ambas partes acusaron a la otra de atacar primero, matar a civiles y romper las promesas de alto el fuego.
Kirguistán reportó 59 muertos y 198 heridos, mientras que Tayikistán reportó 41 muertos y 100 heridos. La violencia también obligó a Kirguistán a evacuar a 136,000 personas debido al bombardeo.
Este choque se convirtió en una llamada de atención y un impulso para renovar las negociaciones fronterizas, que aún resultó ser complicado.
Ambas partes querían adherirse a mapas que los favorecían.
Tayikistán esperaba seguir los mapas de 1924-1927, que se crearon cuando la Unión Soviética comenzó a determinar las fronteras de todos los estados de Asia Central.
Sin embargo, el Kirguistán abogó por mapas más recientes, incluidos los creados cuando se formó la Commonwealth of Independent States (CIS).
El problema se vio agravado por el hecho de que Tayikistán tiene dos enclaves en el territorio Kirguistán: Vorukh y Kayragach.
Como parte del nuevo acuerdo, parte de esta tierra fue entregada a Kirguistán a cambio de otro territorio.
Kamchybek Tashiev, jefe del Comité de Seguridad Nacional de Kirguistán y principal negociador en las conversaciones fronterizas, señaló que ambas partes hicieron concesiones porque "el problema fronterizo nunca debe resolverse a favor de un solo lado".
Como resultado de las negociaciones, los países intercambiaron alrededor de 25 kilómetros cuadrados de tierra, mientras que algunas carreteras y áreas fueron designadas como zonas neutrales para uso compartido.
Una nueva era de cooperación
Junto con el acuerdo fronterizo, los dos líderes firmaron 15 acuerdos de cooperación, que incluían asuntos como el acceso a la carretera y el uso de recursos hídricos estratégicos.
Los viajes aéreos entre los países se renovaron al día siguiente.
Se espera que el nuevo acuerdo, que resuelve la última disputa territorial en Asia Central, mejore la estabilidad y la seguridad en la región al abrir las rutas de tránsito y ampliar el comercio.