La ira de Beijing fue provocada por la eliminación de la semana pasada de una frase clave en una hoja de hechos del gobierno de los Estados Unidos.
China ha reprendido a los Estados Unidos por eliminar una frase que se opone a la independencia taiwanesa de uno de sus documentos de política gubernamental.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos eliminó la semana pasada seis palabras, "No apoyamos la independencia de Taiwán", de un documento en línea que describe la relación de Estados Unidos con la isla autónoma.
En respuesta, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China acusó a Washington de "gravemente retroceder" en su posición.
"Instamos a los Estados Unidos a que … deje de envalentonar y apoyar la independencia de Taiwán y evitar dañar aún más las relaciones de China-Estados Unidos y la paz y la estabilidad del estrecho de Taiwán", dijo el lunes un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino.
Esta no es la primera vez que Estados Unidos ha cambiado su postura pública.
Se realizó un cambio similar en mayo de 2022 bajo la administración Biden, pero pronto se invirtió después de la presión de Beijing.
El gobierno de Taiwán reaccionó positivamente al último desarrollo.
La isla describió el texto actualizado como "positivo y amigable hacia nosotros, reflejando la asociación cercana y amigable entre Taiwán y los Estados Unidos".
No está claro por qué el idioma fue alterado y cuál será la postura exacta del presidente de los Estados Unidos sobre China y Taiwán.
Si bien Estados Unidos sigue siendo el aliado más importante de la isla y el mayor proveedor de equipos militares, los comentarios recientes de Trump han provocado preocupación en Taipei.
La semana pasada, el presidente de los Estados Unidos sugirió que Taiwán, un importante productor de semiconductores, había quitado los negocios injustamente de los Estados Unidos y expresó el deseo de ver que la industria regresara al suelo estadounidense.
Mientras tanto, China ha intensificado su presencia militar en torno a Taiwán, que es autogobernada, pero nunca ha declarado su independencia del continente.
Beijing, que afirma que debe controlar a Taiwán, no ha descartado tomar la isla por la fuerza.
La hoja informativa actualizada de los Estados Unidos sostiene que Washington espera que "las diferencias se resuelvan por medios pacíficos, libres de coerción, de una manera aceptable para las personas de ambos lados".